Solo puedo decir que hago la música que me nace
Entrevistamos a Virginia Fernández, cantante y compositora en Seda, nueva banda que presenta “The Belly” (Gaztelupeko Hotsak), su primer disco. Rock and roll con profundidad abisal y superficie rugosa que promete mucha energía y resolución en directo.
Iturria: | Mondo Sonoro |
Eguna: | 2021/04/15 |
Holden Fiasco
Como nos cuenta en la entrevista, Virginia Fernández, prolífica y heterogénea cantante, involucrada en varios y variopintos proyectos musicales anteriormente, tenía un puñado de canciones escritas que encontraron una vida nueva gracias la sinergia creada en el estudio con otros músicos. Acompañada del batería Galder Creo, de los guitarristas Félix Landa y Pit Flanagan, y del bajista Mikel Caballero, todos ellos con amplio currículo y larga experiencia, grabaron en Silver Recordings, de la mano de Martín Guevara, el disco que ahora presentan, “The Belly”, y que comenzarán a defender este próximo domingo 18 de abril en la Sala BBK dentro del ciclo Rabba Rabba Girl, con la presencia de Joseba B. Lenoir en el lugar de Pit Flanagan. Para saber más sobre lo que se nos avecina, Virginia Fernández responde a las siguientes preguntas.
Por empezar bien y por el principio, y para ayudar a aquellos
que quizás lleguen a ciegas, ¿nos podéis explicar cómo nació este
proyecto? Porque, además, pica la curiosidad: si no me confundo, empezó
en plena pandemia y, aunque sois una banda nueva, todos los miembros
tenéis un largo currículo. ¿Cómo llegasteis a reuniros todos?
En realidad todo empezó hace más de dos años como un proyecto personal.
Había compuesto varias canciones y me disponía a grabarlas en Sweet Saul
tocando y cantando sola, algo sencillo y sin demasiadas pretensiones.
Había algunos temas que tenían un rollo más rockero y llamé a Félix
Landa para que metiese unas guitarras y darles más cuerpo. A Félix le
gustaron mucho las canciones y me dijo que merecía la pena llamar a más
músicos. Entonces llamé a Pit, Mikel y Galder, les presenté las
canciones y todos se animaron a colaborar. Quedamos para ensayarlas y
surgió la magia, arreglos guapísimos y un sonido propio muy potente que
había que explorar. Dejé aparcadas para otro momento las canciones más
intimistas y nos fuimos a grabar con Martín en Silver Recordings las más
rockeras, así nació The Belly. Todos disfrutamos mucho del proceso y
decidieron que vendrían conmigo a defenderlas también en directo.
Elegisteis de nombre Seda, corto, sugerente, incluso, no sé, en contraste con vuestra música. ¿Qué buscabais resumir o evocar?
Es un nombre que tenía en mente desde hace años para una banda de chicas
que intenté formar en su momento. Me parecía corto, sugerente, fácil de
recordar y muy rockero. Antes de grabar al álbum “The Belly” ya había
grabado cosas con este nombre así que se ha mantenido.
Para definiros, os he oído usar la etiqueta más amplia, rock
(con actitud punk). No sé si veis posible concretar un poco más,
influencias…
Personalmente no me gustan las etiquetas, y me resulta difícil de
definir el estilo, supongo que eso ya lo harán quienes lo escuchen, y
quienes analizan y escriben sobre música. Yo solo puedo decir que hago
la música que me nace, sintiéndome totalmente libre tanto en las letras
como en las melodías, partiendo muchas veces de dos acordes, sin
prejuicios y que una vez terminados es cuando puedes ver los matices a
veces blues, a veces punk, pero sin ser buscados. Evidentemente se
pueden percibir las influencias cuando se escucha: Patti Smith, PJ
Harvey, el grunge de los 90, Dolly Parton, Betty Davis, Tina Turner,
…jajajja, hay de todo!! Luego añadimos la propia sonoridad de la banda,
que es otra entidad que está por encima de nosotros, y donde también
entran en sinergia las influencias de todos los músicos y su propio
estilo, sus arreglos.
Habéis optado por el inglés para las letras. ¿Una elección natural o fue algo recapacitado?
Hay temas en inglés y en castellano, pero en este álbum se han recogido
las que son en inglés porque eran los que más encajaban con el concepto
del álbum. Como te comentaba, el proceso creativo es siempre muy libre y
dejo fluir de forma natural que la expresión nazca en el idioma que
quiera y como quiera. En estos temas, acordes, melodía y letra salía
prácticamente juntas, de forma muy intuitiva. Bueno, no voy a ir de
súper políglota, básicamente son tres los idiomas:inglés, castellano y
guachugüey.
Centrándonos ya en el que va a ser vuestro primer disco, “The
Belly”, empezasteis con un adelanto hace ya unos meses. “Hey” fue la
canción elegida (estrenamos en exclusiva aquí), ¿por qué?
Es la primera que tocamos juntos, con la que saltó la chispa, así que pensamos que era adecuada como single.
Personalmente, veo variedad en la selección, medios tiempos,
canciones con mucha tensión, más directas, con un desarrollo más largo,
hasta con un toque soulero, por decirlo así, con perdón, en “Breaking
the House”… No sé si estáis de acuerdo y si buscabais esa diversidad o
ha sido algo natural.
Bueno, cada canción nace con un pulso y hemos tratado de respetar eso
sin pensar si pegaba o no con las demás, así que no es algo buscado o
intencionado lo de que sea una selección variada, sino más bien es el
sello de la casa: los contrastes y juego de intensidades.
Una de las canciones la habéis incluido en doble versión,
eléctrica y en acústico. Igual me monto la película, pero ¿se
escribieron originalmente pensando en ese formato o es solo cosa de
“Drunken Lover”?
Nació como acústica. Pensé en que fuera algo más folk con varias
acústicas, pero al hacerla con la banda en eléctrico quedó muy guapa con
los arreglos, así que se mantuvo la acústica acompañando para darle ese
rollo roots original que queda muy guapo en el tema. El bonus track de
la versión acústica es el tema tal y como nació y está en cd solamente,
el vinilo no la lleva.
Destaca el buen sonido en general del trabajo, me imagino que
algo habrá tenido que ver en ello Martín Guevara y grabar en Silver
Recordings.
Martín tiene mucho gusto y enseguida pilló el rollo de lo que se
buscaba. Que era grabar algo fresco, sin exceso de producción, o no muy
evidente, al menos. Grabamos tocando todos juntos como se hacía
antiguamente y lo hicimos en tan solo dos días. Se podría decir que la
inspiración estaba en el aire, porque, incluso, algunos temas se
terminaron allí mismo, improvisando. A parte, claro, que son todos unos
musicazos y contábamos con la mano sabia y experimentada de Martín que
guiaba nuestros pasos. Cuando te rodeas de grandes profesionales que
trabajan con el corazón el resultado solo puede ser bueno.
“Se podría decir que la inspiración estaba en el aire, porque, incluso, algunos temas se terminaron allí mismo (Silver Recordings), improvisando”
Las guitarras tienen un gran peso en las canciones, desde mi
punto de vista, si se me permite. En “Clean My Name”, por ejemplo, tengo
la sensación de que forman parte de la narrativa, del mensaje. Además
de Félix Landa, creo que Martín Guevara metió alguna en “Let It Go”y Pit
Flanagan participó en la grabación. Ahora ha habido un cambio con la
entrada de Joseba B Lenoir. No sé si es puntual o de futuro.
Sí, y eso que intentamos que no fuera demasiado guitarrero el disco.
Pero era inevitable, jajaj. Todas tienen una voz importante y, como bien
dices, forman parte de la narrativa: rabiosas cuando tienen que serlo o
locas, como la que se marca Martín en “Let It Go”, otros momentos más
sensuales… Al fin y al cabo, de eso hablan las canciones, de muerte,
sexo, amor, violencia, redención…etc. De momento, el 18 de abril, Pit no
viene, viene Joseba, que encaja como anillo al dedo. Date cuenta de que
todos son músicos que están en varias bandas, así que es interesante
concebir la banda como algo abierto y que el avance del proyecto no
dependa de la disponibilidad de un músico.
Le habéis puesto al disco el título de “The Belly”, como
decíamos antes: vientre, entrañas, vísceras… El rock siempre se asocia a
eso, a lo visceral, lo genuino, espontáneo… Nuevamente, no sé si me
estoy montando una película. Igual lo que queríais evocar es algo
completamente distinto.
Eso es, de eso va, de carnicería fina, de entrañas. “Belly” se menciona
en “Two Words” y da nombre al disco porque esa canción es la caja de
Pandora que destapa todo lo demás. Habla de dos mundos. Uno, el
tangible, el de los sentidos, el de las cosas; y otro más inconsciente,
más personal, un mundo interior, donde lidiamos con nuestros
sentimientos, demonios,miserias y grandezas. Este álbum es el resultado
de sumergirse en ese mundo, pasar lo que los místicos llamaban “la noche
oscura del alma” y regresar más fuerte.
Habladnos un poco de la portada. Creo que es un trabajo de la diseñadora y artista Miriam Ocariz.
Ya estaba decido, prácticamente, el diseño del álbum e iba a ser otra
cosa muy diferente. Pero, un día, viendo unos diseños de Miriam para un
proyecto muy chulo de tatoos que tiene, llamado “Furia Rosa”, se me
quedaron fijadas algunas de sus ilustraciones. A los días, me desperté
con la imagen mental de un dibujo suyo en un vinilo. Lo vi tan claro que
le llamé y se lo conté. Y es que precisamente en su obra hay mucho de
esto que te contaba de “Two Words”. Dibuja muchas cuentas, hilos, perlas
que son como vísceras, personajes etéreos, seres casi incorpóreos que
son pura sensibilidad. Ambas conectamos y vimos enseguida, claramente,
el dibujo que debía ir y la tipografía. Fue algo instantáneo, un
encuentro mágico.
Vais a sacarlo en vinilo, ¿verdad? Y creo que estará ya para
vuestro bolo de presentación, donde compartiréis escenario con Ana
Curra, el próximo domingo 18 de abril, dentro del ciclo Rabba Rabba Girl
en la Sala BBK. La cosa está jodida, pero ¿tenéis algún otro concierto
en perspectiva?
Sí, hay vinilo y cd, editado por Gaztelupeko Hotsak. Estamos valorando
qué hacer estos meses. Hay cosas sin cerrar, pero, con la situación como
está, no sabemos lo que va a salir. De momento, para este bolo del 18
tenemos toda la ilusión y las ganas, y siendo conscientes de disfrutarlo
a tope por lo que pueda venir.
Cuando os presentasteis con “Hey”, la acompañasteis de un
vídeo, obra de Marmitako Produktions. Tú aparecías con rodilleras, a lo
Juliette Lewis, o como Sebastian Page, el bajista de The Movement. ¿Es
un anticipo de la energía que nos encontraremos en vuestros directos?
Pues teniendo en cuenta que las rodilleras son para proteger las articulaciones, te puedes imaginar de qué va la vaina, jajajja.